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Ni se te ocurra soltar
una de tus malas ideas.
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¿Que? Mis ideas
no son malas.
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Si seguro
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Bueno ¿vamos a
salir o nos vamos a quedar acá haciendo nada?
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¿A donde queres
ir?
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Estaba pensando
en llamar a las chicas y tal vez a los chicos, ¿talvez, Manuel? E ir a bailar a
Pacha.
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¿Que te parece a
las chicas y a Santi, y que el le diga a los chicos?
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¡Pero el no se
junta con Manuel!
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¿Porque tu empeño
en que salga con Manuel?
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No es empeño, el
es divertido.
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Si bueno los
demás también.- y ahí se me ocurrió una cosa, tal vez a Bianca le gustaba
Manuel- ¿Te gusta Manuel?
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No que va, me
gusta su mejor amigo, Juan, es súper lindo, pero es tímido, así que nunca
hablamos, ¿así que podemos decirle a Manu?
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Bien pero no lo
invitamos con nosotros, se lo mencionamos.
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¡SI! – se paro
encima de la cama y empezó a saltar, paro de repente- llámalo AHORA.
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Bien, pero vos
llama a las chicas y a Santi
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Si, si, si.
Agarre mi celular y busque su numero y puse llamar, al
segundo pitido atendio
-
Hola Ro
-
Hola Manu, emm te
llamaba para decirte que con algunos amigos íbamos a ir a Pacha hoy. Así nos encontrábamos.
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Seguro entonces
¿te paso a buscar?
-
No, nos
encontramos todos allá, yo voy con mis amigas
-
Esta bien,
entonces nos vemos ahí
-
Si, nos vemos,
bye.- y colgué, mire a Bianca que seguía hablando, esperando a que terminara.
Cuando termino me miro pícaramente.
-
¿Qué, que pasó?-
dije sabiendo que había hecho algo.
-
Nada es que las
chicas vienen acá en un rato para arreglarse, ¿Esta bien?- suspire, por que por
suerte no había sido nada malo.
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¿A que hora vienen? – pregunte resignada
-
En una hora.
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Bien pero me
ayudas a ordenar.
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Si, si, pero me
quedo a dormir.
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¿Por qué?
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Por que no quiero
ir a casa y estar sola, aburrida sin nada que hacer
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Bien, pero mañana
iba a ir a equitación
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¿mañana? ¿A que
hora?
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Después de comer,
Millie me viene a buscar. Habíamos quedado la semana pasada.
-
¿Puedo ir?
-
Si, pero ¿desde
cuando queres ir?
-
Desde que hay
chicos lindos- me miro con una sonrisa. Y yo me empecé a reír a carcajadas y
después ella se unió a mi risa.
Nos pasamos la siguiente hora hablando, y escuchando
música. Mientras estábamos haciendo eso llego mi hermano al cuarto, para
avisarnos que habían tocado el portero y eran las chicas. Hice que Bianca baje
a abrir, así yo ordenaba un poco, el desastre que hicimos.
Tocaron la puerta y fui a abrir, abrí la puerta y
cuando vi quien era cerré la puerta, me mire en el espejo del living, me peine,
rápido y abrí la puerta.
-
Perdón, es que
estaba horrible y pensé que eran mis amigas.- Él me miro sorprendido
-
Esta bien, no
importa, entonces ¿estas ocupada?
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No… bueno si,
ahora vienen mis amigas, pero ¿Qué pasa?
-
Bueno yo quería
invitarte a cenar, pero tal vez otro día.
-
Bueno, nosotras
vamos a salir con unos amigos a Pacha, ¿nos podemos ver allá?- Cuando me di
cuenta lo quise deshacer pero ya no podía.
-
Seguro, voy a
decirles a unos amigos- dijo con una sonrisa
-
Buenísimo, nos
vemos allá- el apretó el botón y esperamos a que el ascensor viniera, oímos
ruido en el ascensor yo sonreí al saber que eran las chicas
-
Rooooo,
llegamos,- cantaron cuando abrieron la puerta, yo me reí de sus expresiones
cuando nos vieron a Sebas y a mi.
-
¿A dónde fueron,
que tardaron tanto?
-
Hola Sebas,- dijo
Bianca- fuimos por bebidas y algo para picotear, ¿pedimos las pizzas?
-
Chicas, él es
Sebastian, ellas son Tiffany, Selena, Juliette y Valeria.
-
Hola, bueno yo me
voy, nos vemos- dijo subiendo al ascensor y cerrando la puerta
-
Bueno, ¿se van a
quedar a fuera, o vamos a llamar para pedir la pizza?
-
¡PIZZA!- grito
Bianca, desesperada.
Las
chicas pasaron, fuimos a mi cuarto y pedimos la pizza, mientras esperamos,
comimos algo de lo que ellas trajeron y tomamos gaseosas, nosotras no somos de
tomar alcohol, aunque algunos amigos si. Tocaron el portero, y baje corriendo a
buscar la pizza, salí y había un grupo de chicos re lindos y el chico de la
pizza, me dio la pizza y yo le pague. Cuando me di vuelta estaba Sebas abriendo
la puerta, empezó a saludar a los chicos, con palmadas y abrazos sonoros,
todavía no se habia dado cuenta de mi. Así que despacio me acerque a la puerta,
para evitar que me viera, no quería conocer a sus amigos, por lo menos todavía
no. Abri la puerta pero cuando estaba entrando, Sebas dijo mi nombre
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Hey Ro, ¿te
ayudo?- ya que me vio hacer equilibrio con la puerta y la pizza.
-
No estoy bien,-
dije rápidamente- se enfría- dije refiriéndome a la pizza,- nos vemos después-
y salí casi corriendo. El ascensor estaba asi que subí, y las chicas me
esperaban.
Les conté
lo que pasó mientras poníamos la mesa, después comimos mientras reíamos de las
pavadas que decíamos. Luego de que terminamos de comer fuimos a mi cuarto y me
ayudaron a elegir lo que me iba a poner. Después de una extensa discusión de
zapatos, polleras, remeras y vestidos, elegí una pollera de brillos, con un top
con poca espalda y me puse una campera de jean oscura, con unos tacos negros.
Después nos maquillamos, no me puse mucho, un poco de delineador, sombra, rimel
negro y gloss.
Cuando
terminamos agarre mí cartera puse mis llaves, mi celular y mi billetera con
algo de plata para ir y volver, luego salimos, habíamos quedado con los chicos
a unas cuadras del boliche por lo tanto, nos tomamos un taxi hasta allá.
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